"A la dulce luz del amor, reconocí o creí deber reconocer, que quizá el hombre interior sea el único que en verdad existe." Robert Walser

martes, 5 de julio de 2016

Adiós, Abbas Kiarostami


   "En la oscuridad total, la poesía sigue ahí. Y está ahí para usted", afirmó una vez Abbas Kiarostami, director de cine fallecido ayer en París a los 76 años, después de meses enfermo. Con la facultad inherente a los poetas de plasmar en lenguaje su propia realidad, sus películas, en un tiempo que no podría aproximarse con mayor fuerza a la oscuridad, afortunadamente seguirán ahí para nosotros. 
  
Abbas Kiarostami
   Anoche Luis Martínez y Jordi Costa Vila, dos personas que miran el cine con amor y lucidez, redactaron sus necrológicas con el afecto de quienes saben que se ha ido un ser humano que reflejó la realidad con sabiduría. El primero hablaba de sus "ojos aún abiertos" y el segundo de "la vida en zigzag"; no en vano, el paisaje que el realizador iraní nos hizo apreciar  con paciencia requería una mirada amplia y la ineludible presencia de un camino. Siempre había un camino.



   Kiarostami fue sabedor de que lo relevante del viaje no es llegar, sino ir. ¡Qué gozoso se habría sentido junto a Theo Angelopoulos, quien dijo una vez que su lugar se encontraba en la ventana de un vehículo, viendo pasar campos y ciudades! Los personajes que ideó, desde el niño de ¿Dónde está la casa de mi amigo? al matrimonio protagonista en Copia certificada, transitan en la búsqueda de lo primeramente inalcanzable. Al final entendemos que lo transformador ha sido justamente la indagación laboriosa, la riqueza del tiempo invertido, la experiencia porosa del trayecto. ¿No alude, en fin, a la vida? ¿No es lo mismo que plasmó en uno de los poemas de su libro titulado -díganme si es azaroso- Compañero del viento

La noche
               larga
El día
               largo
La vida
                corta.

   A dos mil kilómetros de su Teherán natal, en Jerusalén, fue crucificado Jesús de Nazaret. Según cuenta el relato de Marcos, el primer de los cuatro evangelistas, Jesús, en las horas previas a su captura, se refirió a su Padre en los Cielos con una expresión aramea, que después fue incorporada al lenguaje hebreo: Abba. Anoche falleció Abbas Kiarostami, una persona que llevó en su nombre la palabra pronunciada por Jesús y que nos permitió mirar la vida con sus ojos, aún abiertos; un peregrino del zizag, a sabiendas del poder velado que habita en todo itinerario; un director que nos legó su cine, feliz protección frente a la oscuridad total de nuestros días. 

   Ayer se fue un padre. Nosotros, hoy, huérfanos.     

Abbas Kiarostami y Juliette Binoche en el rodaje de 'Copia certificada'